Alzheimer, una epidemia gris para el futuro

Ricardo Salinas Martínez, Jefe del Servicio de Geriatría del Hospital Universitario "Dr. José Eleuterio González"

Actualmente, 860 mil personas padecen Alzheimer en México

Para el 2015, uno de cada cuatro mexicanos será adulto mayor

La actividad física ayuda a retrasar el Alzheimer

Resolver crucigramas y sudokus ayudan a mantener activa la memoria

El geriatra señaló que se estima que haya 3.5 millones de enfermos en los próximos quince años

El 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Alzheimer, enfermedad de demencia más común, que causa discapacidad y dependencia entre las personas mayores.

Las demencias, entre ellas el Alzheimer, representarán algunas de las enfermedades más frecuentes en México, para los próximos años, debido al envejecimiento poblacional.

De acuerdo con el Consejo Nacional de Población (CONAPO), para el 2050, habrá 33 millones de adultos mayores de 60 años, es decir, 1 de cada 4 habitantes del país.

“Hay enfermedades que están asociadas al envejecimiento; unas de ellas son las demencias, que es cuando el individuo empieza a tener problemas en una de las áreas cognitivas (memoria, lenguaje, atención, etc.). Entre las principales está la degenerativa primaria y aquí entra el Alzheimer.

“A la fecha, en México hay 860 mil personas con el padecimiento y se espera que en los próximos 15 años se llegue a los 3.5 millones de enfermos. Ya empieza a ser una epidemia gris”, advierte el Jefe del Servicio de Geriatría del Hospital Universitario “Dr. José Eleuterio González”, Ricardo Salinas Martínez.

En el Día Mundial del Alzheimer, que se conmemora el 21 de septiembre, el especialista de la Universidad Autónoma de Nuevo León recomienda a las personas con antecedentes familiares, una revisión médica a los 55 años de edad. Quienes carecen de este factor, es conveniente una evaluación a los 60 años.

“Acudir a tiempo a un diagnóstico ayuda a tener conocimiento del problema y enfrentarlo con seguridad. Apoya a nuevas intervenciones farmacológicas y no farmacológicas, como medicamentos e intervenciones de índole psicológica y social, que retrasan el desarrollo de la enfermedad y proveen de bienestar y seguridad. El beneficio es global en la calidad de vida del paciente y la familia”, aseguró Salinas Martínez.

Entre los principales síntomas figuran:

• Olvido de las cosas; si es de forma instantánea, repetir preguntas o historias
• Perder o colocar objetos en sitios inadecuados
• Recuerdos distorsionados
• Dificultad para encontrar palabras y pausas en las oraciones
• Confusión o extravío en el hogar
• Incapacidad para ejecutar tareas simples, entre otras.

Algunas de las conductas comunes en una persona con Alzheimer:

• Apatía
• Depresión
• Incapacidad para disfrutar sus actividades
• Irritabilidad
• Ideas delirantes

La enfermedad no tiene cura, pero ¿cómo atrasarla o prevenirla?

• El consumo de omega tres y pescado es una opción.
• El ejercicio físico y actividades intelectuales acorde con las aficiones de la persona.

UANL trabaja en el retraso del Alzheimer en el paciente

El Centro Regional para el Estudio del Adulto Mayor de la Universidad Autónoma de Nuevo León trabaja, desde 2003, en un estudio aleatorizado multicéntrico doble ciego, en donde estudian diversas moléculas para el manejo de la enfermedad del Alzheimer.

“En este momento estamos probando tres diferentes moléculas, en los cuales, se ha encontrado seguridad y con beneficio de ser probadas junto con medicamentos ya aceptados, muy de cerca o de manera solitaria con el consentimiento informado. En este estudio, los pacientes son seguidos muy de cerca.

“Hasta el momento, este trabajo ha brindado gran bienestar para el paciente y retrasa el proceso de la enfermedad. El equipo que atiende a las personas es muy cálido y cercano, y sabe cómo dirigirse al paciente y a la familia que enfrenta este padecimiento”, explica el geriatra de la UANL.

La Máxima Casa de Estudios está en constante acercamiento con grupos de especialistas de Sudamérica, Norteamérica, Europa y Asia. En total han involucrado a 250 pacientes.