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Celebra la biodiversidad

En el Día Mundial de la Vida Silvestre, la Universidad Autónoma de Nuevo León colabora en la preservación, protección, aprovechamiento sustentable y restauración de ecosistemas, a través de la educación, extensión e investigación.

Sabías que México figura entre los cinco países más biodiversos del mundo y cuenta con más de 100 mil especies de plantas y animales.

De acuerdo con la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO), nuestro país posee una gran variedad de ecosistemas debido a su ubicación geográfica y a su diverso relieve.

En el Día Mundial de la Vida Silvestre, que se conmemora el 3 de marzo, es la ocasión para reconocer la riqueza de la flora y fauna del estado y el país, así como crear conciencia sobre su valor ecológico para el planeta, e importancia económica, social y cultural para la humanidad.

“Es una gran oportunidad para celebrar este día, porque Nuevo León y México tienen una diversa vida silvestre. Contamos con desiertos, bosques, selvas tropicales, entre otros ecosistemas. Nuestro país está ubicado en una transición entre Norteamérica y Sudamérica, y es un corredor de flora y fauna importante. Es la ocasión especial para concientizar a la sociedad y hacer un llamado a aquéllos que hacen un mal uso de éstas”, expresó el profesor e investigador de la Universidad Autónoma de Nuevo León, Manuel Torres Morales.

Según cifras de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), en el país se han registrado 49 especies extintas, 475 en peligro de extinción, 896 amenazadas y mil 185 sujetas a protección especial.

Para minimizar el impacto ante esta problemática, la Máxima Casa de Estudios a través de la Facultad de Ciencias Biológicas trabaja en cuatro aspectos básicos que son la preservación, la protección, el aprovechamiento sustentable y restauración de hábitat y ecosistemas.

“Actualmente, tenemos un programa importante de restauración, que consiste en regresar a su estado natural a ciertos ecosistemas, y sobre todo aquellos que están mermados en su dinámica de reproducción y crecimiento. Realizamos una serie de técnicas muy especiales para descontaminar lugares y eliminar especies que son indeseables”, explicó el jefe del Departamento de Ecología de la Facultad de Ciencias Biológicas de la UANL.

Destacó la necesidad de fomentar la educación ambiental desde casa, para que las nuevas generaciones comprendan la importancia de preservar, proteger y convivir de manera armónica con la vida silvestre.

“La gente entiende el problema de que ciertos recursos naturales se están acabando, inclusive, les agrada estar en contacto con los diversos ecosistemas, pero pienso que es importante inculcar desde la educación básica, sobre los riesgos de perder toda esta mega diversidad que tenemos. Para que una especie se genere en el sistema tarda miles de años, de tal manera que este acervo con el que contamos no debemos perderlo”, dijo el especialista en Ecología Acuática y Pesca.

Torres Morales subrayó la necesidad de preservar, proteger y restaurar los ecosistemas que perviven en la mancha urbana. En el área metropolitana cohabitan una gran variedad de fauna como aves canoras en la Alameda; patos y garzas, en el lecho del Río Santa Catarina; vida silvestre en las montañas y cerros: cacomixtle, zorra gris, oso negro, gato montés, ardillas, zorrillos, coyotes, entre otros.

El catedrático de la UANL agregó que muchas especies de flora y fauna en Nuevo León son endémicas, es decir, que no existen en otro lugar; en esa categoría están los peces Platy Apodaca y Platy Monterrey, emblemáticos en su lugar de origen, pero que se encuentran amenazados.

Puntualizó en la necesidad de regenerar los ecosistemas urbanos en los diversos municipios metropolitanos, para crear entes vivos de valor ecológico e importancia social, que permitan la convivencia y esparcimiento de las familias con la naturaleza.

 

¿Qué debemos entender de la vida silvestre?

  • México y Nuevo León están ubicados en un área geográfica de excelencia. Cuenta con las condiciones climáticas excelentes.
  • Tiene un origen evolutivo. No podemos explotar a los ecosistemas y que vayan desapareciendo. Éstos tiene un tiempo de evolución, pero tardarían muchos años en formarse de nuevo.
  • Evitar la sobreexplotación. Anteponer el valor ecológico al interés económico en el aprovechamiento del recurso natural.
  • La convivencia que tiene el hombre con las especies genera una conducta psicológica sana, porque actualmente las personas viven en un ambiente de estrés, y los espacios de áreas verdes disminuyen cada vez más.
  • La belleza escénica. La contemplación de la diversidad natural es de goce y salud mental. Se genera una conducta de protección hacia la flora y fauna.

Responsable: Prensa UANL