Comparten deporte y vidas Tigrilla y Borrego

Gaby corriendo los 100 m.

Valores del atletismo y de familia ayudan a consolidar relación de ambos atletas que participaron en la Universiada Nacional 2014

PUEBLA.- Gabriela y Daniel comparten su gusto por el atletismo desde hace cinco años.
También desde hace cinco años mantienen un bonito noviazgo, del que han surgido planes serios para formalizar su relación.

Gabriela Santos es atleta de la UANL y Daniel Villarreal lo es por el ITESM Campus Monterrey. Ambos representaron a sus instituciones en el atletismo de la Universiada Nacional BUAP 2014 que se celebra en esta ciudad.

Y por encima de la rivalidad deportiva que en ocasiones envuelve a ambas escuelas, ellos han sabido sobrellevar su afinidad acogiéndose a sólidos valores que los dos han aprendido.

“Yo respeto mucho a la Universidad”, dice Daniel, especialista en velocidad, “entrené con Édgar Treviño, me llevó muy bien con él, con sus atletas, con los directivos”.

“La rivalidad es en la pista”, sostiene Daniel, “adentro nos podemos dar en la ‘torre’, pero este deporte no es para hacer enemigos y eso lo considero muy importante”.

“Borregos-Tigres, siempre hay rivalidad, ella es Tigre y yo Borrego. Cuando estamos en la pista yo apoyo a alguna compañera de equipo, pero siempre quiero que gane Gaby”.

Gaby, como le llaman sus compañeros de equipo, recuerda que su relación con Daniel nació en 2009 cuando ambos estaban bajo la tutela del entrenador Treviño en la UANL.

“Lo conocí en el 2008, él terminó la prepa y se fue al Tec, y en el 2009 empezamos a fortalecer esta relación”, menciona Gaby, originaria de Jalisco y especialista en vallas y velocidad.

Ella es Licenciada en Ciencias del Ejercicio por la UANL y ya ejerce su profesión. Es instructora de preparación física de cadetes en la Universidad de Ciencias de la Seguridad, en Nuevo León, y estudia una maestría en administración en la Facultad de Ciencias Químicas.

“La comunicación y la comprensión entre nosotros ha sido esencial por los tiempos recortados que tenemos los dos.

“Entrenamos, competimos, viajamos, a veces juntos, otras veces no. Entonces sí es fundamental conocer la naturaleza de nuestras actividades para entendernos”, señala Gaby, de 24 años de edad.

¿Y qué planes tienen? ¿Qué tan seria es su relación? Se le pregunta a la atleta.

“Ya son cinco años, ahorita estamos en una etapa de madurez, sí hemos hablado acerca del futuro, a él le falta un año para terminar su carrera, que es Derecho”, responde Gaby.

Daniel también coincide. Subraya que como atletas que son, han entendido muy bien el entorno en el que se mueven.

“Han sido diferentes etapas”, enfatiza el atleta, quien cumplirá 24 años en estos días.

“Al inicio, pues los dos hemos sido atletas, ahora ella ya trabaja y está más ocupada, aparte tiene el entrenamiento.

“La relación está muy establecida: las deportivas y las del noviazgo, y eso da lugar a que esto siga bien, y los planes están hablados, me gradúo en un año, iniciaré mi vida profesional y formalizaremos las cosas”, expresa Daniel, vecino de la Col. Santa Fe, en Monterrey.

El atleta destaca que cada uno de ellos ha sido bien aceptado en ambas familias.

“Ella se ha adaptado muy bien a mi familia, yo también conozco a la suya. Hay mucho apoyo de las dos familias para cada uno de nosotros”.

Así, Gaby y Daniel toman sus roles de vida sin que los colores que representan en el deporte sean una limitante.