Compartir:
Diseñan en UANL sistema portátil para captación de agua pluvial
En la Universidad Autónoma de Nuevo León se diseñó un sistema que filtra, purifica y almacena agua de lluvia, por hasta cinco meses. Este modelo permite que personas sin preparación técnica, puedan instalarlo y beneficiarse.
Aunque se han logrado avances en el acceso universal de agua potable, en el mundo hay 663 millones de personas sin suministro del vital líquido. Se estima que el 90 por ciento de la población sin acceso al agua, vive en zonas rurales y el resto, en condiciones de pobreza.
Para atender esta problemática mundial, Miguel Ángel García Hernández, profesor de la Universidad Autónoma de Nuevo León, diseñó un sistema portátil para captación de agua pluvial en zonas de poca lluvia, que permite su filtrado, purificación y almacenamiento.
Este proyecto formó parte de su tesis de Licenciatura en Diseño Industrial de la UANL, en 2010. Hoy cuenta con el registro de modelo de utilidad por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).
“En las comunidades del sur de Nuevo León están a expensas de lo que el gobierno les otorga, ya que viven en lugares muy lejanos. Sus fuentes de agua son ríos, pero esos ríos son de ‘agua dura’, es decir, consumirla genera dolores de estómago.
“Por eso se diseñó este proyecto en base a elementos comerciales, que son económicos y de fácil acceso”, explicó García Hernández.
Sequías y escases de agua potable
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), se estima que en Nuevo León hay 43 mil 192 viviendas sin acceso al agua entubada.
El modelo está compuesto por un conjunto de sistemas. Su propósito es recolectar y filtrar el líquido en temporadas de lluvia, hasta llegar al proceso de purificación.
Además, almacena el agua hasta por cinco meses, lo que permite que los poblados con poca lluvia –como el sur de Nuevo León-, cuenten con el vital líquido en épocas de sequía.
Los tanques tienen capacidad de almacenamiento para 600 litros de agua. El catedrático de la Facultad de Arquitectura explicó que se pueden integrar más recipientes para ampliar la capacidad de recolección del líquido pluvial.
“Hay dos meses donde se presentan lluvias fuertes en el sur del Estado: en mayo y septiembre. En este tiempo la gente no aprovecha la lluvia y por eso se diseñó el sistema.
“En la actualidad, ellos consiguen cubetas pero no les dura el agua porque se echa a perder; tampoco tienen suficiente espacio de almacenamiento y tienen agua por sólo una semana”, señaló García Hernández.
El sistema de captación de agua de lluvia consta de cinco etapas:
- Captador de primeras aguas
- Sedimentador
- Almacenamiento con aireador
- Purificador con pastillas de cloro
- Filtros de arenas (arena, grava y carbón activo).
Para ponerlo a funcionar, no se requiere de otra cosa más que instalarlo y activar el sistema de aireación por espacio de cinco minutos al día.
“Es accesible para cualquier persona que habita en estas zonas rurales, que no tiene que ser un experto en la materia, no tiene que ser un técnico.
“Está diseñado para que cualquier persona lo pueda ensamblar, darle mantenimiento, atenderlo”, puntualizó Gabriela Castillo Garza, profesora de la Facultad de Arquitectura y asesora del proyecto.
22 de marzo, Día Mundial del Agua
Para la ONU, el agua es un elemento esencial del desarrollo sostenible.
“Los recursos hídricos, y la gama de servicios que prestan, juegan un papel clave en la reducción de la pobreza, el crecimiento económico y la sostenibilidad ambiental.
“El agua propicia el bienestar de la población y el crecimiento inclusivo, y tiene un impacto positivo en la vida de miles de millones de personas, al incidir en cuestiones que afectan a la seguridad alimentaria y energética, la salud humana y al medio ambiente.
“En la actualidad más de 663 millones de personas viven sin suministro de agua potable cerca de casa, lo que les obliga a pasar horas haciendo cola o trasladándose a fuentes lejanas, así como a hacer frente a problemas de salud debido al consumo de agua contaminada”.
Responsable: Prensa UANL