No se deben naturalizar los celos

“Soy defensora de los derechos humanos y soy feminista”, dijo antes de decir su nombre Irma Alma Ochoa Treviño

Asistentes a la conferencia

Ochoa Treviño planteó que habría que analizar el discurso y el lenguaje cuando los medios utilizan frases como “crimen pasional"

Más de 240 feminicidios se han registrado en Nuevo León durante los últimos 15 años, asegura Alma Ochoa, directora de Arthemisas por la Equidad A.C. después de monitorear algunos diarios de la localidad.

“Soy defensora de los derechos humanos y soy feminista”, dijo incluso antes de decir su nombre Irma Alma Ochoa Treviño, dirigente de Arthemisas por la Equidad A.C.

Lo hizo al dictar el la conferencia “Feminicidios: historias de amor escritas con sangre”, el martes 23 de febrero, en el arranque de la octava Semana de la Equidad “Feminicidios el costo de ser mujer… La violencia de género y la cultura patriarcal”, que organiza la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Nuevo León del 23 al 26 de febrero, en el marco de su 50 Aniversario.

Desde el año 2000 y hasta la fecha la maestra Irma Alma Ochoa junto al maestro Miguel Villegas Lozano, coordinador de la Extensión de Equidad y Género de la Facultad de Psicología, han registrado los casos de feminicidios auspiciándose en una búsqueda hemerográfica en diarios de la localidad como El Norte, El Porvenir, Milenio o ABC.

En estos 15 años han encontrado que existen en Nuevo León, por lo menos, 240 casos de muertes violentas contra la mujer, o mejor dicho feminicidios, término que estipula la Corte Interamericana de Derechos Humanos desde hace algunos años a la fecha.

“Con esa información hemos sistematizado que un gran número de mujeres han sido asesinadas por quienes les juraron amor. Y en lugar de apoyarlas, ser corresponsables o protegerlas, las han asesinado por situaciones como la celotipia o el abuso de poder; que es el eje principal entre las personas que deciden formar un vínculo amoroso”, expuso la conferencista.

En opinión de la especialista, las diferentes encuestas en relación con mujeres casadas o en unión, de quince años de edad y más, demuestran que muchas han sido agredidas y violentadas desde el noviazgo.

“Primero tenemos que de construir que los celos no son naturales. En los celos muchas personas consideran que son dueños de la vida, salud e integridad de la otra persona. En algún momento estas relaciones empiezan a deteriorarse cuando a las jóvenes o esposas las aíslan de sus demás redes sociales”.

En la conferencia expuso algunos encabezados que encontró en los diarios en estos quince años de búsqueda. Ejemplos como: ‘Asesina ex policía a esposa por celos’, ‘le habla de amor, la asesina con saña’, ‘mata a pareja por ataque de celos’ y ‘Da a esposa 53 puñaladas’, fueron algunos ejemplos.

Y además de los celos, Ochoa Treviño planteó que habría que analizar el discurso y el lenguaje cuando los propios medios utilizan frases como “crimen pasional” para referirse con eufemismos a un feminicidio.

“Nosotras consideramos que no existe un ‘crimen pasional’, de hecho no está legislado así. Habría que analizar el discurso o las palabras para detectar situaciones violentas. Las palabras cuentan, y mucho”.

Las conferencias, talleres, mesas de análisis, presentaciones de libros y exposiciones continuarán hasta el viernes 26 de febrero en los diferentes espacios de la Facultad de Psicología, ubicada en el Campus de Ciencias de la Salud, en la colonia Mitras Centro.